El sueño es una necesidad básica humana, se trata de un proceso biológico fundamental común a todas las personas. El sueño es vital no sólo para mantener una funcionalidad psicológica óptima sino también la funcionalidad fisiológica de importantes sistemas como el neurológico, endócrino, metabólico, inmune y cardiovascular.

Un sello distintivo que caracteriza a las sociedades actuales es la reducción del tiempo que dedican a dormir los niños y los adultos y esto se ha desarrollado paralelamente con el aumento dramático de la obesidad.

Estudios epidemiológicos y de laboratorio realizados indican que la falta de sueño puede desempeñar un papel en el aumento de la prevalencia de la obesidad. La relación entre la restricción de sueño aumento de apetito y ganancia de peso podría derivarse de alteraciones en el metabolismo de hormonas que regulan el apetito y provocan una disminución en el gasto energético.

La organización básica del sueño  se da a través de un proceso complejo de dos estadios el sueño NREM ( sin movimientos oculares rápidos ) ocupa el 75 a 80% del tiempo total de sueño, está ligado al proceso homeostático e implicado en el descanso físico y en el estadio REM ( movimientos oculares rápidos) le corresponde del 20 al 25% del total de sueño y parece estar relacionada con la función mental y por ello es necesario para el descanso psicológico, emocional y para la memoria.

Cada ciclo consta de una sucesión de sueño NREM más REM con una duración de 90 a 120 minutos.

El sueño está involucrado en la sincronización de la programación de las hormonas.

Se ha demostrado que los ritmos hormonales vigilia-sueño son prácticamente irrompibles y que cada hormona tiene un patrón circadiano específico en lo que concierne a su secreción y a su función por lo que romper este ciclo altera su funcionamiento.

Por ejemplo la hormona somatropina (STH)  u hormona de crecimiento que regula el crecimiento post natal el metabolismo y balance electrolítico aumenta la lipólisis y disminuye los depósitos de grasa aumenta la captación de proteínas y mantiene la masa y la fuerza muscular, presenta su ciclo de secreción a la media hora de adormecimiento y que el de la prolactina aparece aparece a los 40 minutos después de la STH. Por el contario la hormona tiroidea  (TSH) y el cortisol desaparecen al comienzo del sueño, la insulina, la leptina (su principal función  es inhibir la ingesta de alimentos y aumentar el gasto energético para mantener constante el peso corporal) y grelina ( es una hormona cuya función es informar al cerebro de que el cuerpo debe alimentarse, así su nivel aumenta antes de comer) se dan en la fase REM. Como podemos ver  cada hormona tiene un reloj programado unas se dan en las fases NREM  y otras en la REM.

Por lo que datos  recientes indican que la restricción de sueño puede afectar el balance, se cree que la relación  entre duración de sueño corto y aumento de peso puede deberse en  parte a la alteración de las hormonas grelina y leptina ya que la privación de sueño baja los niveles de leptina y aumenta los niveles de grelina.

El sueño es un factor de riesgo modificable con una adecuada higiene del sueño:

  • Establecer un horario regular para irse a dormir y despertarse.
  • Si hace siesta no exceder de 45 min.
  • Evitar la ingesta excesiva de alcohol y no fumar
  • Evitar cafeína 6 horas antes de dormir
  • Evitar alimentos azucarados o pesados 4 horas antes de dormir
  • Hacer ejercicio regularmente pero no antes de dormir
  • Dormir con ropa cómoda y temperatura y ventilación adecuada

Fuentes:

https://www.elsevier.com/es-es/connect/actualidad-sanitaria/los-10-mandamientos-de-la-higiene-del-sueno-para-adultos-por-la-world-sleep-society

https://www.intramed.net/contenidover.asp?contenidoid=83607